¿Imaginamos un aula donde la creatividad, el juego y la curiosidad sean protagonistas? Muchas prácticas de educación infantil no solo son válidas en primaria, sino que nos pueden enriquecer enormemente la experiencia educativa. Si incorporamos estas estrategias podemos ser el puente perfecto entre dos etapas claves del aprendizaje.

En este artículo vamos a ver las posibilidades de estas prácticas centrados en la ESA porque al utilizar materiales de la Agencia Espacial Europea (ESA), podemos llevar estas ideas al siguiente nivel, acceder fácilmente a recursos de calidad y transformar nuestras aulas en espacios más inclusivos y emocionantes.
1. Juegos Educativos.
El juego es una de las estrategias fundamentales en la educación infantil, ya que desarrolla habilidades sociales, emocionales y cognitivas a través de la exploración y la resolución de problemas. En primaria, esta metodología puede seguir fomentando el desarrollo de habilidades clave como la concentración, la memoria y la atención. Introduce el juego “Juego de Memoria Espacial”, disponible en la plataforma de ESA Kids (enlace).
Con este juego desafiamos a los estudiantes a recordar y emparejar imágenes relacionadas con el espacio, lo que refuerza la memoria visual, la capacidad de concentración y la atención a los detalles, habilidades fundamentales para el aprendizaje en esta etapa.
2. Asambleas Temáticas.
En infantil, las asambleas fomentan el desarrollo del lenguaje, la escucha activa y la expresión de ideas. Estas competencias pueden transferirse a primaria para fortalecer el pensamiento crítico y la participación activa. Dedica una sesión de asamblea a explorar la pregunta: “¿Te gustaría ser ingeniero espacial de mayor?” Basándonos en el artículo “Los escolares se convierten en Ingenieros Espaciales por un día” (enlace), los estudiantes pueden aprender sobre diseño, desarrollo y pruebas de naves espaciales.
Organiza la asamblea en grupos donde los niños discutan qué habilidades creen que necesita un ingeniero espacial y cómo podrían aplicarlas en su vida cotidiana. Este ejercicio promueve la creatividad, la resolución de problemas y el trabajo en equipo, habilidades esenciales tanto en el aula como en el futuro.
3. Manualidades.
En la educación infantil, las actividades manuales potencian la creatividad, la coordinación motora y la comprensión de conceptos abstractos. En primaria, estas actividades pueden enriquecer el aprendizaje mediante proyectos interdisciplinarios. Organiza un taller donde los estudiantes creen una maqueta para descubrir las propiedades de los materiales utilizando el kit de materiales de naves espaciales, disponible en el recurso “Spacecraft materials kit – Discovering the different properties of materials | Teach with space PR07” de la ESA (enlace).
Esta actividad permite a los estudiantes experimentar con diferentes materiales, analizar sus propiedades como la resistencia, la flexibilidad o el peso, y reflexionar sobre su uso en naves espaciales. Además, fomenta habilidades como el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la aplicación de conocimientos científicos a contextos prácticos.
4. Cuentacuentos.
Los cuentos en infantil estimulan la imaginación, el desarrollo del lenguaje y la conexión emocional con los temas tratados. En primaria, estas historias pueden ser el punto de partida para proyectos más avanzados como la escritura creativa y la investigación. Utiliza las pequeñas historias audiovisuales disponibles en el recurso “Las increíbles aventuras de la misión Hera – Cuentos de Tecnología Terrorífica” (enlace).
En estos vídeo cuentos, los estudiantes conocerán a Hera, la detective de asteroides, y a sus compañeros CubeSats, Milani y Juventas, quienes exploran Didymos, un sistema de asteroides dobles. Los episodios detallan cómo la tecnología es utilizada en la exploración espacial.
5. Exploración al Aire Libre.
En infantil, las salidas al aire libre fomentan la curiosidad y la conexión con el entorno natural. En primaria, estas actividades pueden evolucionar hacia proyectos educativos más estructurados que conecten a los estudiantes con otras comunidades escolares y les permitan explorar la realidad que los rodea. Una excelente manera de hacerlo es participar en el proyecto “Conviértete en detective del clima con la ESA” (enlace).
Este proyecto invita a los docentes y estudiantes a colaborar con otros centros educativos para observar el clima y analizar su impacto en el entorno. A través de salidas escolares, los estudiantes pueden recolectar datos, investigar patrones climáticos y proponer soluciones para cuidar nuestro planeta. Estas actividades promueven habilidades de investigación, pensamiento crítico, y trabajo colaborativo, mientras generan conciencia sobre la importancia de cuidar nuestro medio ambiente.

Incorporar estas estrategias de educación infantil en primaria, apoyándonos en recursos de la ESA, no solo enriquece el aprendizaje, sino que también crea un aula donde la curiosidad, la creatividad y la colaboración son protagonistas. ¡Anímate a llevar el universo al aula y a inspirar a tus estudiantes a mirar siempre más allá! Como educadores, tenemos la oportunidad de ser guías en un viaje que fusiona la ciencia, el arte y la humanidad. ¿Estamos listos para despegar?